Las familias constituyen sistemas complejos en cuanto a su estructura y funcionamiento, en diferentes períodos deben pasar por períodos que exigen adaptación y reforma, de tal forma que se ven sometidos a un cambios, que demandan en ocasiones de ayuda especializada, por eso hay que entender la terapia familiar como un elemento diferenciado y específico de la intervención psicológica.
De una forma similar, una estructura de pareja, en donde coexisten las creencias, valores y experiencias de ambos miembros, y en cuyo sistema complejo a lo largo de determinadas etapas de la vida, y como consecuencia de una multiplicidad de factores, pueden verse abocados a la generación de conflictos. Bien porque no exista una correcta definición común con el tipo de relación que se desea, porque no se hayan establecido los límites en cuanto al control, dificultades por falta de intimidad o apego, problemas en el estilo comunicativo, disfunciones sexuales, relaciones íntimas no satisfactorias o problemas relacionados con la confianza en la otra persona o los celos.